• Detenga totalmente el vehículo, en el arcén, con las luces intermitentes encendidas si la virulencia de la tormenta amenaza la seguridad.
• En tal caso, observe que por la zona en la que estaciona el vehículo no pueda discurrir gran cantidad de agua o quedar embalsada (cunetas, torrenteras, vaguadas, etc.)
• No abandone el vehículo. Permanezca en su interior mientras dura la tormenta y con las ventanillas cerradas.